FITOPLANCTON . 100 ML.

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Dentro del conjunto de organismos que forman el zooplancton podemos distinguir el fitoplancton y los rotíferos. El fitoplancton está formado por algas minúsculas marinas que se encuentran suspendidas en la columna de agua. Esta sopa verde forma la base de la cadena trófica de los lechos marinos. De ahí se comprende que cuando nos planteamos el objetivo de producir nuestros propios rotíferos dominar la producción de fitoplancton se muestra fundamental. Para asegurarnos unas cantidades suficientes de fitoplancton para poder nutrir cualquier otro cultivo es necesario que seamos capaces de ofrecerles las condiciones de mantenimiento que requieren.

Aunque por su tamaño, entre las 2 y las 15 micras en funciónde su especie, no lo parezca las algas que forman el fitoplancton son plantas y tienen la necesidad de nutrirse de azucares y carbono a través de la fotosíntesis. Por ello lo primero que debemos ofrecer a nuestro cultivo es la luz adecuada. Los criterios en cuanto intensidad lumínica son los mismos que los demandados por todas las plantas con grandes requerimientos: Temperatura de color cercana a los 6500º K, entre los 30 y 60 w, para potenciar los procesos fotosintéticos y un fotoperiodo de al menos 12 horas. Podemos alargarlo en algunas horas para acelerar el desarrollo. Las lámparas a emplear pueden ser fluorescentes que debido a su forma nos cubren todo el volumen del recipiente empleado para el cultivo. Estos datos son un poco genéricos, por ello más adelante daremos los requerimientos de las especies más comunes y más sencillas de producir.

El empleo de difusores dentro de los recipientes de cultivo es una práctica bastante extendida para favorecer el movimiento permanente del cultivo. No obstante hay determinadas especies de micro algas que pueden llegar a dañarse con difusores muy potentes.